Qué poco veo a las pobres.
Yo entiendo que todas tenemos ocupaciones, pero hay que hacerse un lugarcito para las amigas (Romu dixit) Y más si son amigas pobres jeje.
Este sábado los astros se alinearon, la llave de Mandala se quebró y nos encontramos. No todas. Eso seríà demasiado, nadie lo resistiría. Jep.
Anyway, nos vimos con Bebu y Romualda. Hubo tour de compras con resultado negativo (las pobres no se decidían y pusieron a mucha mano de obra ociosa a ordenar ropajes desechados por diversos motivos tales como "es de vieja" "es demasiado caro" "es demasiado largo" "es demasiado corto" etc etc etc. Ahhhh, santa paciencia la del sector indumentaria.
Después fuimos a comer mientras las dos brujildas me gastaban por mi reciente conversión al vegetarismo. Jaja. También lloré de risa contándoles que en mi adolescencia cosí etiquetas de Calvin Klein en prendas muy pedorras, tratando de hacerlas pasar por tal o cual. No era rica aún. JAJAJA. Qué ingeniosa, dijo Ro.
Terminamos como terminan todas nuestras salidas; masajeando a Romualda en el sillón y en la cama.
Es muy diva!
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